"Contemplando el cielo y escuchando una melodia que tal vez nunca será famosa, tuve una pequeña idea.
Con una miradita en el pasado, siento que todos fueron románticos y poetas. Escribiendo cartas para personsas de nuestras vidas. Cartas de amor, de amistad. De deudas... E incluso amenazas.
No lo sé, nunca le he dado tanta importancia pero siento que las cartas que provienen de personas que deciden sentarse y tomarse tiempo para escribir cosas que nacen desde el interior, no pueden ser juzgadas para mal.. Ni siquiera creo que puedan ser juzgadas. Pero esa es mi opinión, y es tan probable como incierta.
Tomé una pluma, una hoja de papel y escribí una carta para una persona cuyo nombre sería 'Quien sea que la lea'
Elegí una ciudad, una dirección, un día, una hora, y allá va."
Sabes que cuando la dejas caer en el buzón sobre cientas de cartas más... Ya no hay marcha atrás. Me llegué a sentir tonto. Y culpable... Tantas cartas en el buzón y probablemente la mía sería la única sin sentido.
Y meses después, aún no he recibido respuesta de dicho mensaje.
¿Realmente habrá sido tonto y sin sentido?
¿Cómo sé que las demás cartas del buzón no contenían la misma idea que la mía?
"¡Ja-já! ¡Ja-já!"
Supongo que no tiene sentido cuestionarlo
Pues de donde lo veas
seguirá siendo tan probable...
...como incierto.
-Armando-
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